Nací el 2 de Enero de 1967. Mi nombre es Eduardo Luis Felipe José Carlos, lo que no quiere decir que mis padres fuesen beatos católicos que escogieron los nombres de cinco santos patronos para mí. Para nada. Luis Felipe lo recibí como un homenaje a Luis Felipe de la Puente, guerrillero peruano asesinado en 1965 combatiendo en las alturas del Cusco. José Carlos es un homenaje a José Carlos Mariátegui, el intelectual que fundó la cultura socialista en el Perú en la década de 1920. Eduardo es por mi padre. ¿Quién dice que los sesenta no estaban llenos de contradicciones? Nombres que apuntaban al futuro y genealogía patriarcal, todo en el mismo verso. Mi madre, que tiene mucho más sentido común, quería llamarme Martín...
Soy sociólogo de profesión, lo que quiere decir que puedo ganarme la vida haciendo prácticamente cualquier cosa y justificarme diciendo que estoy haciendo «observación participante». Me gradué en la Universidad Católica, en Lima, y ahora hago un doctorado (que algún día terminaré) en la New School for Social Research, en Nueva York.
Eduardo ha escrito para la sección de ensayos de Ciberayllu.
Diciembre, 1999.